Universidad anfitriona: Universidad Católica de Río de Janeiro
Ciudad: Rio de Janeiro
País: Brasil
Carrera: Ingeniería Industrial
Periodo del Intercambio: 1er semestre de 2013 

Hasta una semana antes de presentarme para la Beca Santander jamás se me cruzo por la cabeza la idea de vivir esta experiencia. Todo comenzó cuando note que en muchas de las empresas requieren portugués. Eso quedo en mi cabeza y un día esperando que llegara un profesor me detuve a leer los afiches pegados en la cartelera del  pasillo de la Facultad de Ingeniería. Ahí vi el afiche de la dirección de Intercambio ofreciendo la Beca a Brasil. Leí los requisitos que solicitaban, los cumplía, y pensé “¿Es muy loco pensar en irme un cuatrimestre a estudiar a Brasil?”. Me comunique con la dirección de intercambio, hable con mi familia y así empezó la ilusión de irme a Brasil. Brasil no era cualquier país, quizás después de años de escuchar a los profesores de diversas materias nombrándolo reiteradamente en las clases y estando en una posición favorable para el desarrollo académico o profesional de cualquier Ingeniero quizás hizo que la motivación tenga un plus.

Porque nunca se me cruzo la idea de un Intercambio? Creo que el hecho de haberme venido con 18 años desde Entre Ríos a vivir solo a la “Gran Ciudad” haya ayudado a no pensar en un Intercambio, pero hoy ya de vuelta en Argentina siento que fue una excelente e inolvidable experiencia.

En cuanto a mis vivencias en Río, puedo decir que todo fue único desde cursar Ingeniería en la Pontifica Universidad Católica de Río de Janeiro, los profesores, los laboratorios, la familia excelente con la que el plan de Housing de la universidad me alojo, las personas de todo el mundo que conocí, la ciudad de Río  la gente carioca, la vida universitaria que tiene la PUC, el campus. Fue una muy buena combinación vivir en Río y cursar en la PUC. Brasil un país tan diferente al nuestro e interesante a la vez, en cuanto a su gente, su cultura.  En la actualidad con todos los grandes eventos que está realizando, Río en particular está muy “de moda” y podes encontrarte con muchos estudiantes de todo el mundo. Solo en la PUC éramos 450 alumnos de intercambio. No vale la pena hablar mucho de sus playas, de sus atractivos tradicionales, las postales, las trilhas de la floresta, de sus fiestas dentro y fuera de la PUC. Respecto a la seguridad de la ciudad, nunca me sentí inseguro. Uno tiene que ser consciente que está en una ciudad muy grande y debe informarse acerca de los cuidados que debe tener, la universidad se encargaba de brindar toda esa información.